El último fin de semana de 2010 ha confirmado la tendencia apuntada en las últimas semanas: que han faltado títulos con gran atractivo comercial en la cartelera que empujasen a los espectadores a ocupar las salas. Los 8 millones recaudados entre el día de Nochebuena y ayer domingo quedan muy lejos (un 57% por debajo) de los casi 18,5 de un año atrás, si bien entonces del fin de semana se aprovecharon los tres días (éste año el viernes era prácticamente nulo al ser la vigilia de Navidad) y, lo que es más importante, tuvo como gran protagonista a AVATAR que, ella sola, se llevó más de 8,3 millones de la taquilla total (un 45% para un sólo título).
AHORA LOS PADRES SON ELLOS (Paramount) se erige en la vencedora del fin de semana con una recaudación de 1,9 millones de euros en 386 pantallas lo que supone un promedio de casi 5.000€ por sala y un acumulado de 2.307.000€ en los cinco días que lleva en cartelera. Muy complicado lo va a tener para alcanzar a sus predecesoras. La primera, estrenada hace diez años, llegó a los 14 millones de euros (con más de tres millones de espectadores) mientras la segunda, estrenada hace cinco años, se quedó en 13,5 millones de taquilla y 2,6 millones de espectadores. No parece que ésta tercera entrega tenga fuelle para superar los 8 millones de euros lo que supondría alcanzar algo más de 1,2 millones de espectadores.
Quizás a alguno de los lectores les sorprenda que hago referencia a salas o pantallas y no a copias como solía ser habitual anteriormente. La primera consecuencia de éste cambio es que los promedios serán más bajos pues es normal que haya más pantallas en exhibición que copias en circulación sobre todo en los títulos más comerciales. El concepto copia pierde su valor cada vez más, sobre todo por la irrupción del formato digital que permite que un único soporte físico (el equivalente a la copia tradicional de 35 mm) se descargue y se proyecte en más de una sala. Si a eso le añadimos el clásico interlock (simultanear la proyección de una misma película en varias salas a la vez con un único soporte) entenderemos que es mucho más explicativo de la realidad del mercado hablar de salas o pantallas que de copias y/o cines.
LOS VIAJES DE GULLIVER (Fox) se lleva la segunda posición durante el fin de semana de Navidad con 1.560.000€ en 500 pantallas, acumula casi 1,9 millones en los cinco días desde su estreno y se convierte en la primera elección del público infantil y familiar por encima de su colega de estudio NARNIA 3 y del dominador histórico del periodo navideño, Disney, con su remake de TRON.
260 pantallas de GULLIVER han exhibido en 3D (un 52% del total) recaudando 920.000€ (un 59%) y promediando 3.540€ por sala mientras el resto de salas se quedan en un promedio de 2.645€. El precio medio de las entradas en 3D se sitúa en 8.5€ mientras el del resto (exhibiciones en 35 mm y digital 2D) se queda en 6.3€.
Tercera posición para CRÓNICAS DE NARNIA: LA TRAVESÍA DEL VIAJERO DEL ALBA (Fox) con 625.000€ en 380 salas (sólo un 23% de ellas exhiben en 3D a éstas alturas). En su cuarto fin de semana cae un 27% respecto al fin de semana precedente y acumula casi 8,5 millones desde su estreno, un 48% de los cuales proviene del 3D. Si nada extraño sucede superará a la segunda parte de la saga estrenada en verano de hace dos años que cerró su carrera comercial con 9,5 millones de euros. En espectadores es posible que quede por debajo debido al efecto del 3D y el incremento del precio en las entradas. Quedará, en cualquier caso, muy lejos de los 18,6 millones logrados por la primera parte estrenada en diciembre de 2005.
TRON (Disney) aparece en cuarto lugar con 620.000€ y 445 pantallas en el fin de semana de Navidad. Cae un 49% respecto al fin de semana precedente, el de estreno, y acumula 2.227.000€ en diez días. Sin duda no será un éxito para recordar por Disney en sus fechas históricamente favoritas. Difícilmente alcanzará los 5 millones de euros al final de su carrera en España. O es un mercado nada apropiado para la película o es que algo ha fallado en la promoción previa al estreno. No es nada habitual que España pinche tanto respecto a la taquilla norteamericana en un estreno comercial de Disney.
Un 40% de las salas exhibían en 3D éste fin de semana y han recaudado más del 65% de la taquilla de los tres días promediando unos 2.225€ por pantalla. El resto de copias apenas superan los 800€ por sala. El precio medio de las entradas en 3D se dispara hasta los 8.8€ mientras el resto de sitúa en 6.5€. Este dato, con precios superiores a los GULLIVER, indicaría mayor presencia de público adulto en la de Disney que en la de Fox, que se habría beneficiado de precios inferiores para niños y matinales razón por la cual su precio medio habría sido más bajo. Una señal más de que éste año la oferta para los más pequeños no ha llegado desde el estudio más acostumbrado a liderar las navidades.
Quinta posición para la película española más taquillera de 2010. TRES METROS SOBRE EL CIELO (Warner) suma 570.000€ en 325 salas en su cuarto fin de semana (cae un 40% respecto al anterior) y hace que su marcador particular se encarame hasta los 8 millones de euros y se permita pensar en el horizonte de los 10 millones.
A continuación se sitúan otras dos de las novedades de la semana estrenadas el miércoles 22. BRUC (Universal) consigue 440.000€ en 270 pantallas en el fin de semana para un pobre promedio de 1.624€ por sala. Acumula 507.000€ en los cinco días y no parece sencillo que llegue ni a los dos millones de euros. EL DISCURSO DEL REY (DeAPlaneta) por su parte obtiene mejor promedio pues sus 385.000€ provienen de 105 salas lo que supone unos 3.620€ por pantalla. Acumula 443.000€ en cinco días y puede pensar en remontar con el boca a boca y las más que probables nominaciones a los Oscar pero nadie puede evitar la sensación de entrada discreta, claramente por debajo de lo que cabía esperar a la vista de las nominaciones a los Globos de Oro y las buenas críticas que la precedían. Tiempo al tiempo, no obstante.
BALADA TRISTE DE TROMPETA (Warner) se queda en 360.000€ en su segundo fin de semana (un 43% por debajo de su fin de semana de estreno) con un promedio cercano a los 1.270€ para cada una de las 285 salas en que se exhibía. Acumula 1,2 millones y debería superar los 2 con cierta comodidad. MEGAMIND (Paramount) recauda 295.000€ en su cuarto fin de semana en las 360 salas que aún la mantenían. Su acumulado es de 5,4 millones y su taquilla final (que en éstos momentos no parece que deba llegar a los siete millones) será, a buen seguro, una de las grandes decepciones de la temporada. Lo dicho para TRON vale para MEGAMIND corregido y aumentado pues en la de Disney hay un componente de público adulto que recordase la primera versión de la película que podría haber confundido al espectador infantil y familiar. Nada que ver con la de Dreamworks, una película de animación con clara aspiración de ser la película familiar de las fiestas. Gran decepción se mire como se mire. Un 49% de su taquilla proviene del 3D.
Cierra el Top10 BURLESQUE (Sony) que recauda 260.000€ en 270 salas para un promedio de 970€ por pantalla en su segundo fin de semana. Cae un 48% respecto al fin de semana de estreno y acumula 916.000€ en diez días. Llegar a los dos millones parece en éstos momentos un objetivo complicado.
Del resto de la cartelera conviene repasar, en primer lugar, las otras novedades de la semana. TENGO ALGO QUE DECIROS (Vértigo) recauda 46.000€ en 40 salas (promedio de 1.150€) y acumula 56.000€; EL PEQUEÑO REY MACIUS (Flins & Pinículas) sólo consigue sumar 11.000€ en 30 pantallas (promedio de 365€) y apenas llega a 14.000€ en cinco días mientras A CASA POR NAVIDAD (Golem) se queda en 7.600€ durante el fin de semana en 20 salas (380€ de promedio) y acumula 9.000€ desde el estreno el pasado miércoles.
Aproximadamente 1.140.000 espectadores acudieron a las salas durante el fin de semana de Navidad lo que lleva el precio medio del mercado hasta los 7 euros (no olvidar que en ésta cifra se incluye el 3D).
De cara a la próxima semana destacan dos novedades. La más comercial, THE TOURIST (Sony). La independiente, LA LLAVE DE SARAH (Emon). Ambas llegan el miércoles 29.
En general, como he comentado anteriormente, han sido unas fiestas con títulos que no han tenido el tirón suficiente entre el público como para hacer crecer la taquilla de forma significativa. Hay que confiar en que de cara al próximo año la cosa mejore.
6 comentarios:
Un abrazo de nuevo y ojalá no sea éste un artículo aislado.
Preocupante situación se mire por donde se mire. Encabezas el artículo por el bajo tirón comercial de los títulos presentados. Ojalá sea así, pero no deja de quedar un resquicio para la desesperanza en forma de situación más allá de lo puramente coyuntural. Habrá que estar alerta a los próximos meses, pero hace bastantes semanas que esto se arrastra... Veremos...
El sector analiza otros mercados y la tendencia que tenemos en el nuestro (el español) no parece ser la tónica general de otros paises. Más sorprendente, aún... Merece una reflexión profunda ahora que acaba el año.
Y merecería la pena que hiciéramos una reflexión igualmente respecto al 3D. Ya hemos llegado a la situación, en apenas 1 año (lógica, por otra parte), de que el 3D, per se, no es garantía de taquilla. Son muchos los títulos que ya se han estrellado en formato tridimensional. Parece como si el avance tecnológico en gran pantalla ya no tuviera ningún valor para el consumidor, probablemente porque en formatos más pequeños pero nada despreciables (dadas las múltiples fórmulas domésticas que hoy tiene el consumidor para alcanzar ciertos niveles tecnológicos en su propia casa) y fácilmente accesibles, el consumidor puede colmar sus "inquietudes tecnológicas". Si es así, el 3D tendrá un doble componente: habrá sido la tabla de salvación para la industria durante un tiempo, pero puede tener un efecto pernicioso más a corto plazo de lo que nos creemos al desplazar de una manera más rápida lo que podría considerarse como la esencia del cine (el contenido).
Ahora bien, aunque mi reflexión fuera cierta, tampoco habría que echar todas las tintas sobre el 3D. Será un elemento coadyuvante más, porque todo está yendo tan rápido (contenidos legales y de pago por la red, generaciones plenamente tecnológicas de gente a punto de llegar a la mayoría de edad y que además son el target principal de la industria, etc, etc) que queda la sensación de que ni los propios operadores que controlan nuestras conductas son capaces de ralentizar algunas cosas que parecen imparables. Ya no quedan gurús...
Veremos, pero tengo la sensación de que el semáforo se ha puesto naranja. A ver cuánto tarda en ponerse rojo...
Sigué ahí, Joan. Unos cuantos te lo agradeceremos.
Hola Miguel Ángel. Gracias por seguir ahí después de tantos meses. Intentaré que no sea un artículo aislado.
Estoy de acuerdo contigo en lo preocupante de la situación. Creo que hay elementos que no ayudan en nada a mejorar el panorama, como pueden ser las descargas ilegales y el avance de las nuevas tecnologías y la facilidad de acceso a las mismas por buena parte del target primario del cine como ocio.
Aún con todo, las nuevas tecnologías deben considerarse no como una amenaza sino como una oportunidad. No se puede frenar algo que va tan rápido y que llega a tanta y tanta gente. Hay que profundizar en el desarrollo de nuevas formas de distribución que supongan poner accesibles los contenidos en cualquier soporte y con ventanas de tiempo más cortas. Eso sí, respetando a los propietarios de los derechos, a los creadores. Si alguno de ellos quiere que su producto (su peli) se ofrezca el mismo día del estreno en salas de cine (o antes), adelante. De lo contrario, acceder a ese contenido (sea Video On Demand de alquiler, de compra, streaming) desde el dispositivo que sea deberá ser a cambio de un coste económico.
Cuanto antes los agentes de la industria se pongan de acuerdo en cómo congeniar los intereses de unos y otros antes se podrá frenar el efecto dañino de las descargas ilegales (con la necesaria acción del ejecutivo y el legislativo).
Dicho ésto, sigo pensando que todavía hoy el mercado del cine en nuestro país (como en los demás) se rige por la comercialidad de las pelis que se estrenan. Comercialidad percibida por el espectador que no necesariamente es la misma que la que presupone el distribuidor. A mi modo de ver éste 2010 ha habido poco producto del que denominaríamos muy atractivo comercialmente. Y en ciertos títulos tengo la sensación de que las campañas de promoción y publicidad así como las política de ventas han pecado de no trabajarlas a fondo, como si la película en cuestión tuviese que ganarse al público por sí misma o como si lo tuviese ganado antes del estreno. Y tal y como están las cosas cada peli necesita el máximo esfuerzo para cumplir con sus objetivos.
En cuanto al 3D estoy de acuerdo contigo en que probablemente no será un boom permanente pero actualmente está dando buenos resultados. Quizás sea un tanto pernicioso para cierto tipo de cine en el futuro pero si observamos resultados como los de TRON (en que la taquilla de copias tradicionales es muy inferior a la del 3D aún habiendo más copias en el mercado) hay que concluir que, de momento, su presencia está justificada. Yo apuesto porque siga habiendo pelis como ECLIPSE u ORIGEN que sin el 3D son 3ª y 5ª del año en recaudación y 2ª y 4ª en espectadores. Veremos si el fenómeno se repite por mucho tiempo.
No me enrollo más. Un placer volver a charlar con vosotros.
Hola Juan:
Matizando un poco mi comentario anterior, creo que la preocupación reside no tanto en las oportunidades que genere las nuevas tecnologías (que hay todas las que sea uno capaz de imaginar) sino si éstas suponen un cambio de conducta en el target primario que, además de imparable, resulte imprevisible. Dicho de otra forma, no existe precedente alguno para poder evaluar correctamente las tendencias (quien podía imaginar lo que ha supuesto facebook, twiter, y lo que aún no conocemos) de una generación que ha crecido precisamente en dicho escenario, y que le queda muy poco tiempo (la generación del 2.000 o quizás un poco antes; y ya no te cuento las venideras) para acceder a la franja de edad que supone ese target primario del cine. A eso me refería con lo de que no existen gurús, y que a lo mejor el futuro es imprevisible.
Es evidente que si nos dirigimos hacia un escenario en el que las fórmulas que tu apuntas (video on demand, streaming, etc,) son necesarias (y quizás únicas para dicha generación), eso afectará a los contenidos (el que disfruta de las cosas de forma inmediata, también quiere un contenido "diferente") y a muchos otros factores, y no sólo a la forma de acceder a ellos (sea ilegal o ilegal, éste es otro debate). Y en este proceso, el 3D creo que ha sido un elemento que está en la misma dirección (es decir, dejar el contenido y la esencia del cine en un segundo plano) pero que no deja de ser un simple factor coadyuvante, más allá de una magnífica cortina de humo desde un punto de vista puramente industrial (que de eso se trata).
En resumen, mi comentario venía en el sentido de que quizás lo que estamos viendo ahora, más allá de que se trate de unos estrenos poco atractivos, sean los primeros síntomas de un cambio radical en las reglas del juego, y que quizás a los operadores que controlan el sector les resulte incluso complicado controlar no sólo el propio proceso (véase, facebook) sino, especialmente, su velocidad.
Pesimismo, para nada. Los contenidos audiovisuales (mejor definirlo así de cara al futuro, más que hablar de cine), no desaparecerán nunca. Los "niños" seguirán jugando, pero a ninguno le interesará el "parchís".
Un abrazo. Y a ver si la gente se anima.
Hola de nuevo, Miguel Ángel:
Por el bien del cine tal y como lo hemos conocido y como todavía lo conocemos espero que te equivoques en el diagnóstico. Si los contenidos han de ser pobres debido a los nuevos tiempos, estamos muertos.
Yo quiero pensar que seguirá habiendo nuevas ideas y buenos guiones que sigan atrayendo público primero a las salas y luego al resto de opciones de consumo de cine.
A mi no me sorprende lo flojo de éste fin de año. Una tercera entrega como AHORA LOS PADRES SON ELLOS de una saga agotada; otra tercera como NARNIA, en que la segunda ya quedó a años luz de la primera; un remake como TRON, que no queda claro a qué target se dirige y que es un remake de un fracaso comercial de su momento; una nueva adaptación de GULLIVER y YOGUI pero situando a sus protagonistas en nuestros días (qué obsesión tiene Hollywood con hacer éstas cosas)...El resultado no me sorprende. Cuando ha habido apuestas claras y de calidad el público ha respondido: ORIGEN, TOY STORY 3, ALICIA, la misma ECLIPSE, AVATAR por supuesto...
Seguiré creyendo que ésto aún no está condenado a muerte.
Un saludo y buen año.
Hola Juan:
Nada... que la gente no se anima... Tendrás que hacer un artículo cada semana para ver si así se les pasa el "mal trago de tu ausencia temporal" y fidelizarse con un blog impagable. Pero si los contenidos que tu has ofrecido (cuando lo has hecho) nada tienen que ver con los de nuestro amigo Brunet. No hay ni punto de comparación posible, y gratis... En fin...
Por añadir un poco más de leña al fuego, y matizando tu último comentario, los contenidos que quizás nos depare el futuro no creo que puedan definirse como "pobres", sino más bien como "diferentes". Y para ilustrarlo, cuento una pequeña anécdota personal. De joven, yo jugué al fútbol (era un crack!!!) y el que ha jugado de una manera un poco seria (que fue mi caso) y ve un partido de fútbol por la tele antes de que el jugador le de a la pelota, por la posición del cuerpo, ya sabes si va a ser bueno o no el pase. Hace unos meses tuve ocasión de jugar al fútbol en la Wii (ya sabes que puedes practicar el deporte que te de la gana con la Wii) y el que sabe un poco de esto llega a la conclusión que es una "simulación irreal" (aunque sólo sea porque la tecnología nunca puede estar por delante de la realidad, por más que la ajusten). Y reflexioné sobre como puede gustar tanto la Wii (ya sea futbol, tenis o lo que tu quieras)... Pensé: la gente joven de hoy en día no tienen criterio... Hasta que entendí que el problema era otro: mis criterios y los de las generaciones que han crecido en este escenario no tienen nada que ver (ni mejores ni peores). Y total nos llevamos unos 25-30 años, pero las cosas van mucho más rápidas que antes.
Pues con el audiovisual va a pasar igual. La generación a la que me refiero aún no ha llegado a la franja de edad del target primario, pero le queda poco. El que crea que este escenario de "all fast" no afectará a los contenidos, creo que se equivoca. Y será producto de crecer en un escenario que, no es que haya evolucionado, es que no tiene nada que ver con el de hace unos 20 años. Ni mejor ni peor, totalmente diferente. Y el 3D sin ser causa de nada, ha sido un elemento que se ha posicionado en la misma dirección. Sin entrar en valoraciones profundas, si algo generan sin dudarlo las innovaciones tecnologícas es inmediatez (en las compras, en los servicios, en la información, en las relaciones personales, en la enseñanza, y paro porque me voy del blog...). Y los contenidos audiovisuales habrán de ajustarse a la generación "all fast" (permitidme la expresión). ¿Cómo? Veremos que hacen los operadores que controlan la industria, pero nadie (aunque fuera gratis) de las generaciones anteriores a los 90 prefiere ver "Robin Hood" en una pantalla de ordenador que en una sala de cine, pero si preguntas a los de la generación de los 90, igual el porcentaje se va al 50% si la peli es gratis, y si vamos avanzando ni te cuento. Si esta afirmación nos la creemos, es que algo serio está cambiando, más allá de lo que es legal o ilegal (que insisto, es otro debate). Los criterios de generaciones anteriores ya no sirven (la esencia del facebook, desde mi punto de vista, es la chorrada más grande del mundo, y seguro que nos lo explican en qué consiste antes de que "explote" y nadie se lo cree. Sin ir más lejos, ni el propio Zuckerberg, si analizamos con cierto rigor su propia experiencia.
Perdonad el rollo. Sólo era por motivar al personal.
Hola de nuevo, Miguel Ángel:
Esto parece un cara a cara. A mi no me importa. Al contrario!
Creo que es inevitable que los nuevos contenidos se adecuen a los hábitos de las nuevas generaciones (no entraré en el debate de si los creadores de contenidos se adecuan o si son ellos quienes han modelado las nuevas conductas). Lo que a mi más me importa es que eso no suponga la desaparición de otro tipo de contenidos. Que convivan unos y otros. Incluso esa parte de jóvenes que puede preferir el consumo en un ordenador estará más cerca de "cambiar de causa" si hay contenidos diferentes que se deban consumir en un cine.
En ese sentido el papel del 3D es muy útil. Ha sido (al margen de otras consideraciones negativas, que las tiene) una forma de ofrecer al público (joven, adolescente e infantil especialmente) algo que no podían encontrar en su ordenador o en su dispositivo digital.
Es evidente que experimentar la realidad siempre es mejor que el sucedáneo. No podremos evitar que exista el fútbol en la Wii pero preocupémonos de que los niños disfruten del fútbol en vivo. Dicho de otra manera, si hay contenidos para consumo rápido, que convivan con otro tipo de contenidos. Y a lo mejor el "all fast" es pasajero (no en el tiempo sino para esos consumidores, por su propia evolución) pero sólo podrá haber trasvase a otro tipo de consumo si esos otros contenidos no han desaparecido.
Lo dejo aquí no sea que me líe más y no haya dios que me entienda!
Gracias por seguir ahí. El lunes próximo habrá artículo sobre la taquilla del fin de semana de año nuevo (todo apunta a que el primer puesto se lo disputarán GULLIVER y THE TOURIST).
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